Parece Suiza, pero es Cataluña: la ruta menos conocida del Pirineo catalán que podría estar en los Alpes

Por economía y por clima parece difícil comparar Suiza con Cataluña, pero la naturaleza hace milagros y hay parajes catalanes que podrían pasar por suizos y no solo en fotos. Hay paseos por los Pirineos que te hacen sentir como Heidi en casa de su abuelo o incluso en Sonrisas y lágrimas.

Uno de estos lugares que hacen viajar al visitante hasta Suiza sin salir de Cataluña se encuentra en el Parque Natural del Alt Pirineu. Se trata de un rincón a casi 2.000 metros de altitud con una casita que nadie tiene que ver con la arquitectura catalana, es completamente alpina.

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Techos a dos aguas, madera envejecida, piedra de la zona y una chimenea siempre a punto. Estas son las características del Refugio Comes de Rubió, un hospedaje que podría pasar por ser la casa de Heidi en Cataluña.

Se ve nada más acercarse al macizo de Orri y empezar a subir. Su silueta de postal, enclavada entre montañas cubiertas de pinos y prados que en verano extienden su verde como una alfombra que se extiende hasta el infinito, ofrece una de las experiencias más bucólicas del Pirineo catalán. 

Cómo es esta montaña

Todo en este paraje remite a calma, aire puro y naturaleza desbordante. El verdor del entorno, salpicado por flores silvestres y cruzado por pequeños arroyos, recuerda a paisajes típicos de Suiza. Todo está tranquilo.

A 2.000 metros de altitud y lejos de la costa catalana no hay masificaciones ni rutas trilladas. Es una zona aún poco explorada, ideal para quienes buscan desconexión real. 

Refugio Comes de Rubió

La casita de Heidi

En primavera, verano y otoño, los accesos son más sencillos y permiten disfrutar de un entorno que cambia con las estaciones: desde la nieve en polvo del invierno hasta las alfombras doradas de hojas en octubre. Y es que este refugio es de los pocos que abren todo el año, es por eso que para muchos ofrece una experiencia de alta montaña con todas las comodidades necesarias. 

Cuenta con capacidad para 50 personas, comedor con chimenea y ducha de agua caliente. Y un acceso fácil en coche. Durante la temporada sin nieve (del 1 de mayo al 15 de noviembre) se puede acceder  por pista forestal. En invierno es cierto que el acceso solo es posible o con muy buenas cadenas o a pie y sempre con raquetas, esquís de travesía.

Qué hacer

Precisamente, este es uno de los principales atractivos de la zona, la cantidad de senderos para todos los niveles que pasan cerca de allí. Uno puede disfrutar de paseos familiares por los prados cercanos o practicar actividades algo más exigentes como trail running, mountain bike, esquí de montaña, parapente. Y en otoño, para quien se inicia en la micología proponen excursiones para recolectar setas. 

De todos modo, hay una ruta que es la más conocida de la zona, el Pas de Gegant. Esta es una travesía circular exigente, de 45 km, que empieza y termina en Sort y que incluye el ascenso al Pic de l'Orri (2.440 m). 

Una ruta cargada de leyendas

No es apto para cualquiera, no se hace en un día sino que es un recorrido de dos jornadas qu garantizan una experiencia que hace viajar a los Alpes sin salir de los Pirineos. A través de estos 45 km se pasa por bosques centenarios, antiguos pueblos de piedra, collados alpinos y rincones que concentran toda la biodiversidad pirenaica.

A eso, como no, se le añade el toco catalán. el de las leyendas de los Pirineos. No es de extrañar, el nombre, Pas del Gegant, a dar pistas. Evoca las criaturas mitológicas que, según la tradición, habitaban estas montañas y que forman parte del imaginario popular. 

Refugio de Comes de Rubio WIKIPEDIA

Cómo legar

Llegar al Refugio Comes de Rubió desde Barcelona en coche es una aventura en sí misma. Se debe tomar la A-2 en dirección a Igualada, y desde allí seguir hacia Ponts por la C-1412. Luego se continúa por la C-14 hasta Adrall y se enlaza con la N-260 en dirección a Sort. Pasado el Port del Cantó, se sigue hasta encontrar el desvío hacia Rubió y se asciende por una pista forestal practicable en verano, que lleva directamente al refugio. 

El trayecto completo puede durar unas 3 horas y 45 minutos. Eso sí, en invierno, al no ser accesible en vehículo convencional, es imprescindible consultar con el refugio las condiciones de la nieve y las recomendaciones para acceder con material adecuado.